
A algunas mujeres con enfermedad y síntomas simplemente se les debe vigilar. Es importante que la mujer mantenga un programa regular de exámenes médicos (cada 6 a 12 meses) para notar cualquier cambio u observar si la enfermedad ha empeorado.
Se pueden administrar analgésicos para aliviar el dolor. La suspensión del ciclo menstrual crea un estado parecido al embarazo (seudoembarazo) y puede ayudar a prevenir el empeoramiento de la enfermedad. Dicho seudoembarazo se puede inducir con anticonceptivos orales que contengan estrógenos y progesterona. Este tipo de terapia toma de seis a nueve meses y mejora la mayoría de los síntomas, pero no evita la formación de tejido cicatricial a causa de la enfermedad. Los efectos secundarios comprenden el manchado con sangre.